El descubrimiento de la existencia de este tren tiene que ver con las informaciones proporcionadas por el hijo de Pascasio Escribano, cuando contacté con él por primera vez. Hasta ese momento había considerado la posibilidad de que la amistad con mi abuelo viniera de haber combatido juntos en la misma unidad militar. Según José, sin embargo, su padre había servido durante la guerra como sanitario en un tren que recorría la costa mediterránea.
Este descubrimiento abrió una posible línea de búsqueda nunca antes había considerado, que Antonio, en lugar de combatiente, hubiera sido sanitario, algo que podría encajar también con el hecho de haber realizado el servicio militar en la Comandancia de Sanidad Militar de Madrid. Mi abuelo Félix, recordemos, que estaba destinado en ese misma Comandancia, durante la guerra, parece que actuó como sanitario.
Una de las cuestiones que ha estado siempre presente a lo largo de la investigación es el momento en el que Antonio Gómez y Pascasio Escribanos se conocieron. Más adelante veremos algunos detalles de la vida de Pascasio Escribano en su relación con Antonio, pero es necesario adelantar algo de esa relación, y es la posibilidad de que fuera en este tren donde entablaran amistad.
En un primer momento, lo único que conocía sobre ellos es que ambos habían trabajado juntos en Marsella como estibadores en el puerto, y que habían compartido vivienda en esa ciudad. Durante el proceso de la investigación aparecieron documentos que mostraban que ambos compartieron más, y que se conocían, como veremos más adelante, desde por lo menos mediados 1939, cuando ambos coincidieron en la misma Compañía de Trabajadores Españoles en los Alpes franceses. Pero era posible que se conocieran desde febrero de ese año, cuando pudieron coincidir en su paso por la frontera el mismo día. La vida paralela que se evidencia, por lo menos desde ese momento, me hacía pensar en una posible amistad fraguada durante la guerra.
Dos documentos de los archivos franceses, referidos a cada uno de ellos, y fechados al final de la Guerra Mundial, presentan una coincidencia importante entre ambos, la fecha de entrada en Francia, el 10 de febrero de 1939, y curiosamente, ambos documentos fueron rellenados por la misma mano. Ese dato, como hemos visto, de la fecha de entrada en Francia fue uno de los que me llevó a considerar la posibilidad de que hubieran sido compañeros de armas, y pasado la frontera al mismo tiempo como parte de los últimos militares que pasaron por el paso de Portbou, ese día, con la 100 Brigada Mixta. Si hacemos caso a Tagüeña, ese día 10, los que pasaron por la frontera, en la madrugada y al amanecer, fueron los miembros de la 11 división.
Sin embargo, la hipótesis de que ambos fueran compañeros de armas, decayó al conocer que Pascasio había servido en la guerra como sanitario, y estaba destinado en el tren hospital que recorría la costa desde Tarragona a Barcelona y Gerona, recogiendo heridos y trasladándolos a los hospitales.
Como consecuencia de ese descubrimiento se abrían varias posibilidades distintas para el momento en el que se conocieron:
• Ambos recalaron en el campo de concentración de Argelés-sur-mer, por lo que pudieron haberse conocido en dicho campo, y la fecha del paso de la frontera sería una mera coincidencia, o incluso podría suceder que, como las fichas de ambos la redactó la misma persona, uno y otro pudieron haber pasado a Francia en fechas distintas, pero que anotaran la misma fecha en el documento, al no recordarlo alguno de ellos, aunque no hubieran pasado juntos.
• No puede descartarse la posibilidad de que se conocieran más tarde, en diciembre de 1939, primera fecha en la que el nombre de ambos aparece en un listado de una CTE, como veremos más adelante, que ratifica que en ese momento se conocían, sin ningún género de duda.
• Antonio pudo viajar herido en el Tren Hospital, y Pascasio le ayudó, una vez en la frontera, a subir la montaña del Col de Belitres, y pasar a Francia. No hay constancia de que el tren prosiguiera por el túnel hasta la estación francesa de Cerbere. El hecho de que la mayoría de la gente subiera por la montaña indica claramente que el túnel estaba bloqueado por los franceses.
• Dado que Antonio había realizado el Servicio Militar en Sanidad Militar, puede que ambos viajaran en ese tren como sanitarios, aunque en la familia nunca se ha referido un dato similar, sino su participación activa en la guerra y de ahí su posible herida en una pierna. Sin embargo, como sabemos, el servir como sanitario no impide que hubiera podido ser herido desarrollando sus labores, sobre todo cuando se actúa en el primer escalón de batalla.
No tengo datos sobre la sanidad de la 11 división en esos momentos. Como hemos visto, la documentación de toda la división pasó a Francia con ella, y allí se pierde su pista. Es posible que las unidades sanitarias o parte de estas viajaran en dicho tren acompañando a la tropa.
Fuera lo que fuere, una vez conocido el dato de que Pascasio fue sanitario durante la guerra, y su vinculación a un Tren Hospital, investigué sobre si en las fechas de la retirada a finales de enero o primeros de febrero, viajó algún tren hospital hasta Port-Bou, de forma que hubieran podido confluir allí sus caminos, y por lo tanto fuera posible conectarlos en ese momento.
Una pequeña indagación en relación a la sanidad militar y los trenes sanitarios me permitió conocer que existió un tren sanitario que cumplía estor requisitos. Un tren, al parecer el último que salió desde Barcelona antes de la ocupación fascista, que transportaba heridos y enfermos, salió de la capital catalana el día 20 de enero con dirección a Port Bou. Según cuenta Carles Hervás i Puyol (2004: 275), durante la organización de la salida de la ciudad de los heridos y el personal sanitario, el jefe de la sanidad republicana, trasladó su puesto de mando, el 20 de enero a Gerona “y a partir del día 25 de enero, se instalará en la denominada "posición Cajal", un tren hospital estacionado en la línea ferroviaria de Barcelona a Port-Bou, cerca de Llança. Sometido a un fuerte bombardeo, al final de la evacuación va a quedar situado dentro del túnel ferroviario de Port Bou. Desde allí se van a dar las órdenes pertinentes de evacuación por parte del Inspector Jefe de Sanidad, el coronel Josep Puche Álvarez y del teniente coronel Joaquim D'Harcourt Got, Jefe de los Servicios Quirúrgicos, el cual va a ser el encargado de coordinar los movimientos de todo el personal sanitario, heridos y enfermos de toda los centros de Cataluña, correspondientes a la 3ª Demarcación de Sanidad militar de la República". Al parecer, este tren al que nos referimos, "El último tren que lleva heridos sale desde Barcelona en dirección a Port Bou el día 25 de enero de 1939, a las cuatro de la tarde llegando a su destino sin novedades". (Hervás i Puyol 2004: 278). Con alta probabilidad, este era el tren en el que viajaba Pascasio Escribano. El tren, como vemos, quedó estacionado en el túnel de Port Bou, y desde este lugar, si los franceses no permitían el paso de trenes o civiles por el túnel, el único camino hasta el paso de la frontera habría que hacerlo subiendo toda la montaña.
Eulalio Ferrer ( ) en du diario, relata la llegada a Port-Bou el día 5 de febrero, donde pernoctaron en un vagón del tren en el túnel fronterizo, esperando su turno para la salida, lo que sucedió el día 7 cuando logró entrar a Francia. Allí, en la plaza de Banyuls, se encontró con Antonio Machado y su madre, a los que entregó su capote militar.